Chico Chino, empresa cuencana inició sus operaciones en el año 2002 con un local pequeño ubicado en las calles José Joaquín de Olmedo y Huayna Capac, ofreciendo a su clientela una variedad de platos de comida, pero destacándose por un plato en especial, su famoso pollo broaster, plato que encantó al paladar de la gente cuencana que llegaba a consumir en su local.
Debido al crecimiento de su clientela que llegaba de diferentes lugares del país, se vio en la necesidad y obligación de expandir su local, ubicándose en casa propia en las calles Gonzales Suarez 2-18 y José Joaquín de Olmedo.
Dando un giro a su nueva imagen y creando un lugar muy acogedor para su clientela, el local siempre se ha caracterizado por su atención y amabilidad, pues es un lugar donde llegan las personas y se sienten como en casa, no solo por la atención sino por el sabor exquisito de sus platos.